MIS TESOROS

MIS TESOROS
ISA, RAMÓN Y BELÉN

sábado, 3 de enero de 2015

Gracias a la vida




Buenos días, mis lindos y queridísimos hijos. Esta madrugada tropecé con la primera luna de 2015.  

Aquí   la tenéis


Y no puede evitar recordar esta canción que tanto me gusta: gracias a la vida

 que me ha dado unos hijos maravillosos… Y me ha dado tanto.

jueves, 1 de enero de 2015

Un cuadro que me mira


               Todos los días amanece, todos los días, son, pues, nuevos

Sí, queridos hijos. un cuadro, un cuadro herencia de abuelos y padres. Siempre presidió el mejor sitio en la casa de mi infancia. Y desde que falleció mi madre, y por expreso deseo suyo, aquí está, por encima de mi escritorio. Vosotros lo conocéis bien. Me mira, siempre me mira. Años y años mirándome. 
También mis ojos, a diario, buscan su mirada. Y no es un sentimiento religioso lo que me guía, no. Podía ser una fotografía de mi padre, de mi madre, de un marginado, de un niño… Podía ser la mirada de cualquier ser humano… 
Pero en este cuadro que me mira, la imagen, la fotografía, el icono… hay un algo que me transmite serenidad. Es como si en mis peores momentos, su mirada fija en la mía, me repitiera: No pasa nada. Y esta madrugada, cuando el mundo eclosionaba con estruendos festivos, su mirada me decía: No te preocupes por los años. El tiempo es un reloj parado. Tú si tienes cuerda; no dejes que se te detenga.
Y yo, como sumergida en un mar de miradas calmas azules, blancas, rosas…escribía: queridos hijos:  Que sepamos,  cada día de este nuevo año, estrujad la vida y del agridulce que abstengamos, sepamos extraer el dulce  y compartirlo; el agrio, el amargo, tragándolo como podamos porque casi nadie querrá saber de él. Cada día perdido en las distracciones que ofrece el camino, es irrecuperable; basta mirar la fecha del almanaque.

Pero, sobre todo, basta recordar el día de ayer para caer en la cuenta de que ya es una vieja historia escrita, bien en nuestro haber, bien en nuestro saldo. 
Os quiero más , mucho más, que a mi vida...