MIS TESOROS

MIS TESOROS
ISA, RAMÓN Y BELÉN

domingo, 17 de abril de 2016

FELICITACIÓN A MI HIJA

Mi querida hija, Isabel María: día grande, muy grande, al que tuve la dicha de asistir, fue la entrega en Sevilla y en espectacular escenario  de tu merecido Premio Joaquín Guichot.  Por experiencia  ya sabes cómo a los padres nos alegran mucho más lo logros de nuestros hijos que los propios.
Muy feliz y agradecida a Dios y a la vida, por verte subir al escenario y recoger el premio que hace veinte años, recibí yo. Tú, mi querida hija, al igual que tus hermanos, sois tan maravillosos que no tengo palabras para expresar lo agradecida que me siento a los tres. También a papá, artífice  cómplice que desde dónde y cómo esté, seguro, que sonríe.

Quiero que se conserven imágenes de aquel gran día, uno más de los muchos que tanto tú como tus hermanos, habéis protagonizado. Os quiero muchísimo más que a mi vida.



PREMIADOS, CONSEJERA DE EDUCACIÓN Y PERSONAL DE LA JUNTA


ENTREGA DEL PREMIO A MI HIA

AUTORIDADES DE LA JUNTA, SU COMPAÑERA Y MI HIJA


TAMBIÉN YO "POSÉ" COMO RECUERDO DE ESTE GRAN DÍA


MI HIJA, SU PAREJA, HIJOS, DIRECTOR DEL CENTRO, AMIGOS Y OTRA VEZ, YO

domingo, 3 de abril de 2016

Carta a mi hija por su premio

  
Viernes 1 de abril de 2016- 

Mi querida hija, Isabel María: te lo he contado muchas veces, pero quiero hacerlo una vez más,  porque es importante que sepas como fuiste deseada, y por supuesto al igual que Ramón y Belén, y cómo te llevé conmigo  casi desde el mismo día que lo deseé.
Verás, mi mayor deseo de casi toda  mi corta,  todavía,  vida, era visitar a la Virgen de Lourdes. Y es por eso que elegí ese destino en mi viaje de novios.
Allí, ante aquella Virgencita, formulé mi deseo de tener una hija. Y allí, en los tres días que pasamos, fuiste concebida, si bien en aquellos años no se conocía el sexo de los  niños hasta que no nacían, y es cierto que deseaba una niña pero en el fondo la ilusión era idéntica, si hubiera sido varón.
Es por eso que digo que te deseé, que te he deseado siempre. Y fue inmensa mi alegría y la de papá el día que naciste. Desde muy pequeña fuiste buena, siempre sonriente, pero asustadiza y tímida a medida que ibas creciendo.
Estudiaste con fuerza de voluntad increíble, aficionándote a todo, pintura, baile, manualidades, etc. Siempre recordaré el pañito de crochet que hiciste en una noche, sin yo darme  cuenta, cuando todavía no habías cogido en tus manos una aguja, y cuando me sorprendiste con el cuadro de la Gioconda, pintado al óleo, de igual forma,  en una noche. Eres, hija, mágica. Todo, sin excepción, y eso sí, con mucha voluntad, eres capaz de hacer.  Me pintaste en pirograbado como primera obra que hacías, repujaste cuero, me dedicaste poesías, aprendiste  a bailar flamenco…
¿Eres consciente, vida mía, de los dones que Dios te ha dado? No lo sé, pero los estás  aprovechando, y bien,  al servicio de tu  familia, de la escuela y de la vida que te rodea.
Eres, hija, una maravilla, que me faltan palabras para dar gracias a la vida, a Dios… , sí, gracias por ser como eres y por tener la suerte de que seas mi hija.
El viernes recibiste el primer premio a tu trabajo, premio que pude vivir, gozar y emocionarme. ¡Si papá te hubiera visto, allí, en el escenario, recibiendo el premio  tan ambicioso y trabajado!  Te veía yo por los dos y veía tantas y tantas cosas… te aplaudíamos, te abrazamos...

No me extiendo más, pero quiero dejar constancia del día y del proyecto, de tus poesías para el mismo. Sabes cuánto te quiere tu madre.

Autoridades y premiados.

Entrega del premio.
Portada del Lbro-Proyecto
Una de las páginas del libro